En la carrera de Salta de la Clase 2 del Turismo Nacional apareció en pista en 2008 un muy joven y casi desconocido Pablo Ortega. Pasaron 70 carreras y “Pabloso”, luego de muchos intentos y varios podios, finalmente llegó a la victoria. Y por extensión pasó ser el líder del certamen 2017.
“Lo de La Pampa se dio cuando menos lo esperaba. Parecía que tenía que conformarme con estar lo más arriba posible, pero en un instante todo cambió y la carrera fue mía” señaló Pablo, recordando una final que, hasta la última vuelta, no tenía dueño.
Se diría “tanto va el cántaro a la fuente que al final...” Eso pasó y Ortega puso en práctica aquello de “hay que sacarlo todo afuera”. “En la vuelta de honor me sentí increíble. Di un solo grito largo, como esos de las películas de indios. Festejé a lo loco. Tenía ganas de bajarme del auto sobre la misma pista y ponerme a bailar. Y también de saltar a la tribuna y festejar con todos”.
¿Y qué hay del día después? “Pensé en tomármelo tranquilo, como un hecho normal. Es más, el primer mensaje que respondí fue de la empresa, porque tenía que organizar la jornada laboral a distancia. Pero fue todo distinto a cómo lo pensé. La gente del TN me llevó a hacer una recorrida por programas de radio y de TV de Buenos Aires. Fue intenso todo, no sé si tanto como correr una final de la C-2, pero algo parecido, y también muy lindo.”
Cuatro elegidos
El cuarto tucumano en sumar una victoria en el TN, después de Roberto Sánchez, Marcelo Chediac y Lucas Mohamed (que ya lleva seis victorias), siente que esperar tanto por algo que se desea lleva a que, cuando sucede, se produzca una explosión de todo. “Se siente alegría, descargo, emoción. Me saqué una mochila de encima. Y no sólo por el hecho de haber vencido por fin: el reglamento de este año obliga a ganar una carrera para ser campeón. Yo con este triunfo ya estoy habilitado. Es como que comenzó otro tipo de campeonato para mí”.
“Pabloso” descartó también que la experiencia hecha en otras categorías, más las carreras en el TN, fueron determinantes para ganar el fin de semana. “Me ayudó para no desesperarme, para estar tranquilo y esperar una oportunidad. Se dio a favor mío esta vez, como quizás no podría haberse dado.”
¿Llegó este triunfo en el momento justo?, se le consulta. Piensa un segundo y responde: “Siento que se tendría que haber dado el año pasado. El esfuerzo fue muy grande en esa temporada. No se consiguió por cuestiones externas, como roturas del auto. Esta vez fui a intentarlo de nuevo, y lo bueno es que se dio rápido, lo que otorga un plus muy interesante para el resto de la temporada”.
Hace pocos días, Ortega estuvo en España efectuando prácticas con un coche de la Copa Clio de ese país, con la posibilidad de sumarse al certamen desde mediados de temporada. Él dice que esa experiencia le cambió cosas algunas ideas en su cabeza. “Volví con otro concepto en aquello de hacer la puesta a punto de un auto. Aprendí detalles que apliqué en los entrenamientos.”
Del futuro hay mucho por decir. “Pabloso” lo mide como un cazador estudia a su presa. “Una cosa es haber ganado y, a partir de ello, trazar una estrategia para lo que viene. Y otra hubiera sido ir corriendo fecha tras fecha sin llegar a una victoria. Eso cambia la cabeza y va cargando de frustración”, analiza. Y baja una marcha para lo que se viene. “Es muy bueno saber que en Las Termas habrá dos carreras este año. El circuito me gusta, me siento local y eso es también cómodo. Voy a apostar al podio. Igual, antes que eso, tengo que pensar primero en la próxima, que se hará en Posadas. Fecha a fecha, firme y seguro.”
El Fiat y su desarrollo
“Apenas llegué ayer a Tucumán, ya me puse en contacto con los ingenieros del Fiat Palio para ir definiendo las pautas de trabajos para los próximos días. De paso, ya estoy analizando la estrategia que voy a seguir en la próxima carrera de Posadas.”
Festejos ¿Y más festejos?
Terminada la carrera en La Pampa, “Pabloso” festejó con los integrantes del equipo FP Racing; a su lado, su novia Andrea (foto). A su regreso a Tucumán, más allá de los múltiples saludos de familiares, amigos y clientes, un pedido: “hay que reunirse para festejar este triunfo.”
Encuentro emocionado
Juan Ortega, hermano de Pablo y también piloto del TN (está 4° en el certamen de la C-2), subió esta foto, en la que se ve al ganar de La Pampa abrazado con el papá, Bernardo. Este último fue intervenido quirúrgicamente en las últimas horas, y se recupera satisfactoriamente.
Con la prensa porteña
Durante casi todo el lunes, Pablo recorrió los estudios de varias emisoras de radio de Buenos Aires para hablar de su triunfo en el circuito pampeopano. Y también fue invitado al programa “Última Vuelta”, especializado en automovilismo, que se emite por Fox Sports.